El
Departamento británico de Sanidad ha decidido levantar, a partir del
próximo mes de abril de 2014, las restricciones impuestas a la
actividad asistencial de los profesionales sanitarios infectados por
el VIH, particularmente en el campo de la cirugía, la obstetricia y
la odontología.
Los avances en el tratamiento y control de la
transmisión del VIH colocan el riesgo de transmisión a partir de un
profesional infectado pero correctamente tratado en niveles
inapreciables, por lo que los profesionales que acrediten un correcto
tratamiento y, con ello, un descenso de la viremia hasta niveles
indetectables, podrán realizar todo tipo de actividades clínicas
para las que estén capacitados. Los servicios responsables de salud
laboral, junto a los médicos responsables del tratamiento en cada
caso, serán los encargados de certificar dicha situación.
Fuente: BMJ 2013; 347: F5146