En la Mesa Sectorial de Sanidad celebrada el 23 de febrero, AMYTS dio su conformidad a la resolución que desarrolla el mandato
de la LEY
6/2011 de 28 de Diciembre en lo referente a la jornada laboral de 37,5
horas
semanales para los empleados públicos. Y lo hace, a pesar de que sigue
rechazando que la aplicación de la misma se haga con el fin de
obtener una
disminución en los gastos de personal (ver carta del Comité Ejecutivo).
Sin tratarse de una opción satifactoria, ante la imposibilidad de incumplir un horario que ha sido fijado con rango de Ley por la Asamblea de Madrid, las únicas opciones posibles son una manifestación pública de disconformidad, pero tener que acatar la ley al ser la misma de obligado cumplimiento; o buscar a través de la negociación con la Administración la aplicación menos dañina para el colectivo médico y para la calidad de la asistencia. AMYTS ha optado por esta segunda vía y condiciona su expresión de conformidad a la norma, al cumplimiento por parte de la Consejería de Sanidad de los compromisos adquiridos.

