domingo, 2 de noviembre de 2014

CON FIRMA. "Zapatero, a tus zapatos, o de cómo cada cual debe dedicarse a su función", por Julián Ezquerra

Dr. Julián Ezquerra.
Entre las frases célebres de la obra El Principito ( Le Petit Prince) de Antoine de Saint-Exupéry está la siguiente: “Me pregunto si las estrellas se iluminan con el fin de que algún día, cada uno pueda encontrar la suya”. Pues bien, esto me viene a la mente al leer en redacción médica (http://www.redaccionmedica.com/noticia/-no-estamos-preparados-para-una-epidemia-de-ebola-8064) lo siguiente en relación a unas declaraciones del Presidente del Consejo de Enfermería:
“Inapropiado el comunicado de Amyts”
Preguntado ante la defensa que hicieron, tanto el Colegio de Médicos de Madrid, como el Sindicato Médico Amyts, González Jurado ha tachado de “falta de rigor” y de inapropiadas esas declaraciones, al considerar que “el facultativo nunca se equivoca”.

Me dejó muy sorprendido, y pensé que sería posible que al no haber encontrado su estrella, se fije en la que tenemos otra organización, que como está muy iluminada, se encuentra fácilmente.

Hace ya mucho tiempo que desde lo que representamos como organización profesional de médicos y titulados superiores sanitarios, tenemos claro cuál es nuestro cometido, nuestro papel, lo que somos y a quien representamos. Somos escrupulosamente correctos con otros profesionales, a los que reconocemos, y de los que somos compañeros de fatigas, pero siempre desde el mayor respeto hacia ellos y sus instituciones. Pero por una vez y sin que sirva de precedente, hoy me veo en la necesidad de comentarlo.

En la última semana, y a raíz de unas declaraciones de la paciente contagiada de Ébola, Teresa Romero, a la que de nuevo deseo su rápida recuperación y con la que todos hemos estado sufriendo, como organización profesional hemos tenido la obligación de hacer un comunicado en defensa de una compañera, Médico de Familia, cuya responsabilidad, profesionalidad y buen hacer había sido cuestionado.

A lo largo de esta crisis del Ébola, el Consejo de Enfermería también ha sido muy activo en los medios, haciendo críticas y publicando un extenso informe, con un absoluto respeto por parte de nuestra organización. Y ha sido así por entender que ambas organizaciones tienen sus papales y representan intereses diferentes. No creemos que nuestro cometido principal sea entrar en valoraciones públicas sobre las opiniones de otros profesionales o sus representantes.

Pero también a la inversa debemos pedir que se respeten nuestras opiniones, nuestra defensa de los profesionales a los que representamos, y en definitiva de nuestra autonomía. Más aún cuando las diferencias están entre profesionales médicos y una técnico de enfermería, que por cierto no son representadas por el Consejo de Enfermería, y que además tiene su organización profesional que de forma clara y contundente hace defensa de sus profesionales.

No me quiero extender más. Solo reiterar y pedir respeto institucional hacia nuestra organización, y desear que el Consejo de Enfermería y quien lo encabeza, encuentre un estrella bien iluminada que la haga suya, no mirando la estrella de otros.

Y todo ello desde el mayor respeto y admiración hacia la profesión enfermera, nuestros más cercanos colaboradores y a los que reconozco su abnegada labor y su importancia máxima en los cuidados de los pacientes, a los que al fin y a la postre, cada uno en sus habilidades, conocimientos, y responsabilidades, dedicamos nuestra actividad.

Julián Ezquerra Gadea,
secretario general de AMYTS