sábado, 25 de enero de 2014

GESTIÓN Y CLINICA. "La saturación de la urgencia hospitalaria", por Miguel Ángel García Pérez


Volvemos a sufrir, como viene siendo habitual en esta época, la saturación de los servicios hospitalarios de urgencia, con pasillos llenos, pacientes retenidos, etc.

Y estamos acostumbrados a la negativa, por parte de la autoridad sanitaria, de esta situación; en concreto, nuestro consejero hacía explícita dicha negativa hace unos días, a pesar de la realidad reflejada por diferentes medios, y finalmente reconocida por él mismo, mediante la contratación de personal de refuerzo. Nos queda mucho por aprender en gobernanza de lo público, sobre todo en lo referido a transparencia; véase, si no, cómo el gobierno australiano informa, minuto a minuto, de la situación real de sus servicios hospitalarios de urgencia. En esas condiciones, imposible negar la realidad.

La saturación de los servicios de urgencia tiene repercusión en los profesionales, que se ven en la obligación de estirarse para poder ofrecer la mejor atención posible en unas condiciones nada deseables. Sin embargo, no debería ser el sobreesfuerzo de los profesionales la garantía del mantenimiento de la calidad asistencial en unas condiciones adversas, sino una correcta planificación de los servicios que los hiciera adaptables a este tipo de condiciones.

* MATERIAL RESERVADO PARA AFILIADOS A AMYTS. PARA SEGUIR LEYENDO PICHAR AQUÍ