sábado, 2 de noviembre de 2013

ACTUALIDAD. El número de pacientes en lista de espera quirúrgica bate récords en Madrid

Aprovechando el contexto de denuncia contra la privatización sanitaria de la Marea Blanca de domingo 27 de octubre, el diario EL PAÍS  puso de relieve al día siguiente varios datos que revelan que Madrid bate récords en el incremento de las lista de espera para las intervenciones hospitalarias. “Nunca desde que, en 2004, se puso en marcha un plan específico en respuesta a la promesa electoral de Esperanza Aguirre —aseguró en 2003 que dimitiría si algún madrileño tardaba más de 30 días en pasar por quirófano— había habido tantas personas esperando una operación: 65.913. Y nunca habían aguardado, de media tanto: 98,7 días. Por primera vez se roza el número redondo de los 100 días. 



Esta es la demora que sufren los pacientes que, al rechazar la primera opción que les ofrece Sanidad (suele ser una clínica privada) son penalizados con esperas hasta siete veces superiores”. (...)
También por primera vez, -afirma EL PAÍS- más de la mitad (52%) de los pacientes que figuran en la lista de espera prefieren ser operados en su hospital público y le dicen a Sanidad que no quieren ir a la privada. Porque en realidad no se puede hablar de una sola lista de espera, sino de tres.

Gráfico elaborado por EL PAIS
A diferencia del resto de España, un paciente no entra en lista cuando su médico indica la intervención. En Madrid, lo hace tras pasar por el anestesista, es decir, unos 30 días más tarde. Esa es la primera lista: la de los que aguardan el preoperatorio. Después están los que, haciendo uso de su derecho a la libre elección, quieren ser operados en su hospital. Finalmente, está la “espera estructural”. A estos pacientes sí se les opera en menos de 30 días: en 13,2 de media, según los últimos datos, de agosto, proporcionados esta semana por la Consejería de Sanidad. Antes, eso sí, han figurado en la lista del anestesista, y han aceptado lo que Sanidad les ofrecía. Por el truco de ganar 30 días en el preoperatorio el Ministerio de Sanidad expulsó a Madrid del cómputo nacional en 2005. En 2012 volvió a ser admitida, pese a que no ha cambiado su manera de proceder. Según una portavoz del Ministerio, “se transforman los datos de manera que midan lo mismo que las otras comunidades”, es decir, se hace una estimación, pero asegura que las cifras “son comparables”.


Los recortes acabaron con las jornadas de tarde en los hospitales, que ahora se han sustituido por contratos de médicos al 50% de jornada con los que se abren los quirófanos fuera del horario de mañana. “No son suficientes”, dice Julián Ezquerra, secretario general del sindicato médico AMYTS. “Las jubilaciones y los recortes han mermado mucho las plantillas”.