Módulo
3: Distribuciones de probabilidad. La distribución normal.
Hasta aquí
hemos estado trabajando en el ámbito de la estadística descriptiva,
del análisis de los datos que obtenemos a partir de una observación
dada. Sin embargo, lo que nos interesa normalmente no es tan sólo
describir unos hallazgos, sino sobre todo valorar si esos datos
tienen un significado concreto que nos brinde un conocimiento
determinado de la realidad, y que, en nuestro caso, como
profesionales de la Medicina, podamos aplicar a la mejora del nivel
de salud de individuos o poblaciones.
Para ello, necesitaríamos
conocer hasta qué punto nuestros datos son representativos de la
realidad de la población que nos interese, o si muestran una
relación de los valores de una variable con los de otra, de forma
que podamos tratar de incidir sobre una de ellas para obtener
resultados favorables en la otra. Necesitamos entrar en el ámbito de
la estimación poblacional y de la relación entre variables, que es
el contenido de la Estadística Inferencial, y que analizaremos en
otro curso. Pero para ello hace falta primero adquirir algunos
conocimientos básicos sobre Probabilidad, que son la base sobre la
que se desarrolla la Estadística Inferencial, y que vamos a
desarrollar en lo que queda de curso.
Variables
aleatorias y probabilidad
Todos
recordamos la formulación clásica del concepto de probabilidad. La
probabilidad de que, al realizar un experimento, ocurra un resultado
dado depende del número de alternativas posibles. Si el fenómeno
que queremos observar se comporta de forma aleatoria, es decir, por
puro azar, sabemos que esa probabilidad es igual a la relación entre
el número de casos favorables y el total de casos posibles (regla de
Laplace). En el caso de un dado, por ejemplo, la posibilidad de que,
al lanzarlo, obtengamos un 6 será 1/6: sólo un caso de los seis
posibles nos serían favorables. Aunque lo cierto es que no
tenemos la certeza de que, al hacer un experimento con 6 tiradas, en
una de ellas obtengamos necesariamente un 6; lo que sí parece lógico
pensar es que realizamos un número elevado de tiradas, la frecuencia
relativa de obtener 6 como resultado sí tienda a ser muy próxima a
1/6. Continuando con la regla de Laplace, la posibilidad de que el
resultado sea par sería de 3/6 (tres casos favorables de los 6
posibles), o sea, 0,5.
* Curso destinado a miembros de AMYTS. Para continuar pinchar AQUÍ.