Dra. Ana Giménez Vázquez. |
La
Sanidad madrileña está sufriendo recortes enormes e
indiscriminados. Dado que partíamos de un presupuesto de Sanidad muy
inferior al de otras Autonomías, la situación a la que estamos
llegando supone un claro peligro para la calidad de la atención y la
salud de la población.
Los
presupuestos
asignados
en
este
año
para
la
cobertura
de
ausencias
en
los
Centros
de
Salud
se
han
visto
reducidos
de
forma
crítica,
llegando
a
suponer
solo
el
10%
del
presupuesto
del
año
anterior
en
algunos
casos.
Y
no
sólo
no
se
ha
propuesto
un
aligeramiento
de
las
cargas
laborales,
sino
que
un
año
mas
asistimos
a
un
aumento
de
los
objetivos
asistenciales
propuestos
en
el
contrato
programa.
Dicho
de
otra
forma:
HAY
QUE
HACER
MÁS
CON
MENOS
PERSONAL:
Esto
implica
un
empeoramiento
de
la
masificación
ya
existente
en
muchas
de
las
consultas
de
Atención
Primaria
y,
por
lo
tanto,
una
nueva
disminución
en
el
tiempo
disponible
de
atención
e
INEVITABLEMENTE
en
la
calidad
de
la
misma.
Esta
medida no ha dejado impasibles a los médicos ni a los Directores de
los Centros de Atención Primaria, que de una forma casi unánime han
protestado por el nuevo recorte y manifestado ante la Dirección
General de Atención Primaria su profunda preocupación por las
consecuencias que puede acarrear.
Pero
en lugar de soluciones, sólo han obtenido palabras vacías que por
enésima vez apelan a la crisis como justificación y AMENAZAS de
nuevos recortes salariales.
Los
médicos de atención primaria no están haciendo otra cosa que
actuar siguiendo el Código Deontológico en cuyo artículo 6º se
dice :
1.
El
médico
ha
de
ser
consciente
de
sus
deberes
profesionales
para
con
la
comunidad.
Está
obligado
a
procurar
la
mayor
eficacia
de
su
trabajo
y
el
rendimiento
óptimo
de
los
medios
que
la
sociedad
pone
a
su
disposición.
2.
Siendo el sistema sanitario el instrumento principal de la sociedad
para la atención y promoción de la salud, los médicos han de velar
para que en él se den los requisitos de calidad, suficiencia
asistencial y mantenimiento de los principios éticos. Están
obligados a denunciar las deficiencias, en tanto puedan afectar a la
correcta atención de los pacientes.
Desde
AMYTS DENUNCIAMOS que la Administración está coaccionando y
chantajeando a los profesionales:
- Uniendo la firma de objetivos asistenciales a la asunción del brutal recorte que se ha realizado a la bolsa de suplencias.
- Uniendo el pago de una parte del salario, la productividad variable, a la firma del contrato y NO EXCLUSIVAMENTE AL CUMPLIMIENTO DE LOS OBJETIVOS ASISTENCIALES, tal y como legalmente debiera ser y como de hecho y adecuadamente ocurre en los Hospitales.
- Amenazando a los profesionales a que asuman todos los recortes o de lo contrario hay riesgo de impago de nóminas....
Una
vez más, denunciamos la pésima actuación de la Administración
Sanitaria, que cada vez recorta más en Sanidad y ya está
consiguiendo ahogarla. Es imprescindible que se oiga a los
profesionales, que son los que pueden mejorar la eficiencia de la
asistencia, porque son ellos -y no los burócratas que llevan años
apartados de la asistencia- los que conocen las bolsas de
ineficiencia, como por ejemplo, la hipertrofiada e inútil estructura
de gestión.
Ana Giménez Vázquez
Presidenta Sector de AP de AMYTS