domingo, 27 de abril de 2014

CON FIRMA. "Reivindicando el respeto entre compañeros", por Alfonso López García de Viedma

Dr. Alfonso López Gª de Viedma
Esto de los insultos y falta de respeto ente los médicos no acaba nunca y se está convirtiendo en el pan nuestro de cada día.

Desde hace tiempo no hago mas que recibir correos impresentables de ¿compañeros? poniéndose a parir los unos a los otros. Si no teníamos bastante con el espectáculo que están protagonizando en el Colegio de Médicos los miembros de su Junta Directiva, emprendiendo denuncias entre ellos e incluso pidiendo la presencia de la policía (si, si, digo bien, de la policía, en el Colegio Oficial de Médicos de Madrid), ahora se suman otros ¿compañeros? que con sus correos están llevando al enfrentamiento entre unos y otros, y en los que proliferan incluso los insultos, llamando gilipollas y otras lindezas a compañeros por el simple hecho de discrepar o ver las cosas de otra manera.

Supongo que no hace falta explicar porqué dije en su día que dimitía de la Mesa de Atención Primaria del Colegio de Médicos y de formar parte de ningún grupo de trabajo que se invente la gente para ¿trabajar? ¿todos unidos? por el futuro de la Atención Primaria, por el futuro de la AP, que realmente tengo la sensación que interesa a unos cuantos y que quieren dirigirla a su antojo y semejanza. No dimití por petición expresa de muchos compañeros, pero mi pensamiento no ha cambiado: estoy desilusionado (e incluso avergonzado) con el comportamiento de muchos médicos.

Nunca pensé que los médicos íbamos a acabar así, todos enfrentados: los de primaria con especializada, los de primaria con los de primaria, los de primaria del equipo de la mañana con los de la tarde, los de primaria con los del SUMMA y viceversa, los médicos de los equipos con los directores de los equipos... No hay mas que envidias, injusticias y zancadillas.

Sigo adelante con el único fin de poder dar mi opinión, de levantar la voz cada vez que vea una injusticia, un abuso de poder o una falta de respeto a un compañero, sigo adelante para que estos compañeros nuestros, directores de centro y responsables de la Administración, no tengan mas remedio que escucharme y aguantarme; sigo adelante, en definitiva, para poder dormir tranquilo todos los días de mi vida por saber que, a pesar de todo, merece la pena mantener la honradez, la ética, la dignidad y el respeto por esta maravillosa profesión y por la inmensa mayoría de sus profesionales, a los que siempre consideraré compañeros, amigos, colegas... cualidades con las que empecé hace ya 38 años.

Espero que, como me queda muy poco para mi jubilación, pueda conseguir mantener estas cualidades hasta el final, cualidades que por otra parte he intentado inculcar a mis hijos para que vayan siempre con la cabeza alta; creo honradamente que es la mejor herencia que les puedo dejar.

Alfonso López García de Viedma
Médico de Familia - Delegado de AMYTS