El secretario general de AMYTS, Julián
Ezquerra, envió una carta abierta a la presidenta de la regional y
al consejero de Sanidad, con una serie de propuestas para mejorar el
funcionamiento de la Atención Primaria de la Comunidad de Madrid.
Propuestas para mejorar el
funcionamiento de la Atención Primaria
Estimada presidenta de la Comunidad de
Madrid, estimado consejero de Sanidad:
Esperanza Aguirre. |
Pasado un año de la entrada en vigor
del decreto de libre elección y área única, creo que es necesario
hacerles llegar unas reflexiones, amparadas en la experiencia de
quien tiene 30 años de ejercicio y ha tenido la suerte de
desarrollar su trabajo en todos los ámbitos de la profesión, desde
la asistencial como funcionario y como estatutario, en la gestión en
dirección médica y gerencia de grandes hospitales, en la docencia
como tutor de residentes, y actualmente como secretario general de
AMYTS, sindicato profesional médico de la Comunidad de Madrid.
Javier Fernández-Lasquetty |
Son conocedores de la oposición
unánime que la nueva estructura de gestión de Atención Primaria ha
supuesto en todas las organizaciones que representan las diferentes
facetas de nuestra profesión. Nunca nos opusimos a la libre
elección, pero sí al desmantelamiento de la estructura de la
Atención Primaria que se unió a la libertad de elección. Esta
“idea” es la herencia que nos dejó, entre otros muchos
problemas, el paso por la Consejería de Sanidad del que posiblemente
haya sido uno de los peores consejeros que hemos conocido, D. Juan
José Güemes. Su paso por Sanidad tardaremos muchos años en
olvidarlo, pues el mal que hizo será de difícil reparación.
Sin entrar en el mundo de la Atención
Hospitalaria, de la que también podríamos decir muchas cosas,
quiero centrar este escrito en lo que ha supuesto este año para los
médicos de Atención Primaria, y por extensión para todos los
profesionales que desarrollan su trabajo en este nivel. Hemos llegado
a una situación en la que se siente un absoluto abandono, un
desprecio profundo, y tal desánimo en la profesión, que si el
objetivo era la “muerte lenta y agónica” del modelo de Atención
Primaria, están llegando, al fin, a lograr su objetivo. Pero deben
recordar que los pacientes siguen teniendo la mejor opinión posible
de estos profesionales, ya no les deslumbra tanto las tecnologías y
los grandes hospitales, y manifiestan su satisfacción con sus
médicos de familia y pediatras de atención primaria año tras año.
Han decidido un cambio en la estructura
de gestión en Atención Primaria. Para ello nombran directores de
centros de salud sin tener claras las competencias, permitiendo que
personal no médico pueda ser director, lo que entendemos una
ilegalidad y así esta denunciado en los tribunales por diferentes
organizaciones, entre ellas AMYTS, y ya con una primera sentencia que
lo confirma. Además desmontan las 11 gerencias y dejan una figura
que es de forma simultánea director general de Atención Primaria y
gerente único, se “inventan” unas direcciones asistenciales
duplicadas con médicos y enfermeras, así como aproximadamente otros
40 mal llamados “subdirectores”, todos con unas
competencias mínimas. Esto da origen a tal caos organizativo que
hace que los profesionales no sepan a quién dirigirse en sus
reclamaciones, solicitudes de cosas del día a día, donde la
respuesta más habitual es “eso no es de mi competencia”, lo
“enviaré al responsable”, etc. Cualquier compañero de un
hospital de Madrid tiene un referente cercano, en el propio centro,
competente para resolver prácticamente todo lo que se necesita, y
además se sabe a quién corresponde cada asunto. En Atención
Primaria todo es indefinición, nadie asume nada, en teoría un
director general y tres gerentes adjuntos son los referentes,
pero nadie sabe donde están ubicados, no se conocen ni las
competencias de cada uno de ellos, ni los cauces de comunicación.
Estamos en tiempos de crisis, no nos
cansamos de oírlo. Por ello desde mi humilde responsabilidad me
permito hacerles una propuesta. Si realmente creen en la Atención
Primaria, además de replantearse la insuficiente dotación
presupuestaria, desdoblen la figura de director general y gerente
único, la salud mental del que desempaña esta labor lo agradecerá;
creen una Gerencia de Atención Primaria con competencias de gestión,
dejen una pequeña estructura de gestión en cada distrito
asistencial y potencien de verdad al director de centro, médico por
supuesto. Con ello se ahorran 47 puestos de gestión absolutamente
inútiles, y se dará satisfacción a las demandas de ayuda de los
profesionales de Atención Primaria, que podrán volver a creer en el
sistema. De no ser así, al menos hagan públicas sus intenciones y
den posibilidad a quienes siendo aún jóvenes médicos de familia y
pediatras de Atención Primaria puedan reorientar su vida profesional
antes de que su condena al abandono los haga irrecuperables para un
ejercicio profesional satisfactorio.
Gracias por su atención.
Julián Ezquerra Gadea
Secretario General de AMYTS