Ignacio González. |
1.- Parece del todo improcedente que esta reunión se celebre un sábado, y que no se sepa como han sido "elegidos" y a quien representan los profesionales reunidos.
2.- Querer anunciar a bombo y platillo las supuestas mejoras laborales para los profesionales sanitarios de Madrid, es un acto de propaganda electoral que no compartimos. Y no lo hacemos por ser humo lo que anuncian, por ser contrario a lo que han venido haciendo a los largo de los últimos años, y por no haber sido consensuado con las organizaciones que representan a los profesionales. Una vez más diseñan medidas de espaldas a los profesionales, demostrando que no han entendido nada de lo que ha sucedido en los últimos 18 meses.
3.- Las medidas anunciadas están acordadas en su mayoría desde el año 2007 (ver Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid del 7 de febrero de 2007), siendo la propia Administración la que se ha negado a cumplirlas.
4.- Hablar de pactos de gestión, una versión actualizada de las denostadas "peonadas", es sorprendente. Y lo es por la escasa o nula información sobre que son estos pactos, quien los ha diseñado, con quién se han pactado, que cometido tienen, a quién van dirigidas, que fin persiguen, ...etc.
5.- AMYTS es una organización sindical profesional con presencia en Mesa Sectorial y como tal debe exigir que la Administración respete la norma y proceda de inmediato a convocar la mesa para informar, negociar, y dar contenido a la misma.
6.- No podemos estar en contra de lo que acordamos en 2007, y por ello que se hagan interinos, que se concluyan las OPES, que se de autonomía y se pueda entrar a negociar sobre pactos/gestión clínica, que los centros de salud tengan autogestión y que se respeten los demandados por nosotros de forma reiterada turnos deslizantes, ..son medidas que siempre apoyaremos, pero no podemos admitir ahora que nos las vendan y encima aplaudirlas.
7.- No obstante, hay carencias importantes en las medidas anunciadas. Lo que se ha demostrado estos últimos meses ha sido la voluntad de participar e implicarnos en la posible modificación de un sistema sanitario que debemos hacer más eficiente, sostenible y que garantice la universalidad y calidad. Y esto brilla por su ausencia.
En concusión, AMYTS manifiesta su cautela y su escepticismo ante lo anunciado, pues esta Administración ya ha dado muchas muestras de nula credibilidad y compromiso con los profesionales.